Hace unos días la lectura de la Palabra de Dios de la Eucarístía hacía la pregunta de
"¿Y VOSOTROS QUIÉN DECÍS QUE SOY?
Yo me atrevo a decir que eres el único hombre que ha vivido
la plenitud del ser humano.
Viviste las mismas circunstancias que todos los de tu tiempo, pasaste por ser
niño, adolescente y joven. Tus padres
te transmitieron sus valores y creciste en sabiduría y gracia madurando con los
años. Descubriste en todo ese tiempo el sentido
total de la vida humana.
Te fuiste llenando del espíritu de Dios y tomaste conciencia plena de ser Hijo de Dios
y de hacer siempre su voluntad. Para eso estabas en comunicación con Él y te
retirabas a conversar con Él todos los días.
Así que a los treinta años, ya maduro, tomas conciencia de
tu misión y abandonas tu familia y te retiras al desierto para poner en claro
tu misión y tras el bautismo del Jordán,
comienzas a actuar y recordar a todos que el Reino de Dios está cerca.
Tú publicaste con tu vida y con tus palabras que Dios nos quiere y quiere que
nos queramos como hermanos. Con parábolas nos hablas de cómo es el Padre:
espera ansioso la vuelta de su hijo pródigo, paga no al estilo humano sino a su
modo, manda la lluvia igualmente sobre buenos y malos. No quiere
que se separe el trigo de la cizaña pues
no es tan fácil separar lo bueno de lo malo.
A todo hay que darle su tiempo de maduración.
A todo hay que darle su tiempo de maduración.
Tú nos aclaraste que teníamos que parecernos al Papá y ser
de verdad sus hijos ayudando a todos
empezando por los más pobres y despreciados socialmente.
Como fuiste coherente con lo que decías, acabaste llevándote
mal con la religión y la política, y ellos te quitaron del medio condenándote a muerte de cruz.
Y Dios Padre te resucitó, o sea, ha hecho conocer a todo el
mundo cuál es el modo de vivir que Él quiere en cada hombre para alcanzar su
plenitud:
vivir para los demás ya que todo lo demás se quedará aquí;
la riqueza
y el poder no permanecen.
Sólo permanece el amor y eso es Dios Padre:AMOR.
Amor que existe desde siempre y por siempre.
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